¿Sabías que Šibenik es la única ciudad que celebra el 17 de diciembre con la llamada Proslava (Celebración)? Esta es una tradición que se remonta a tiempos antiguos y que, con el tiempo, ha adquirido un significado religioso. El día de Proslava, las familias preparaban comidas tradicionales, y a medianoche todas las campanas de la iglesia sonaban, mientras la gente se reunía en la plaza central – Poljana – donde tocaban música, bailaban y llevaban fritule (buñuelos, un dulce frito similar a una rosquilla, hoy en día generalmente enriquecido con sabores de vainilla, limón y canela) y rakija. Aunque no es tan ruidoso como solía ser, hoy en día, esta ocasión todavía se celebra en los hogares, con comida y bebidas tradicionales. El día antes de Navidad, al mediodía, se tocaba música en el Đardin de Šibenik y la gente paseaba, a menudo visitando el mercado local.

Durante este tiempo, se preparan varias delicias tradicionales en Šibenik y sus alrededores, como pan casero, kroštule, o uštipci (masa frita, similar a una rosquilla), entre otras cosas. En Nochebuena, tradicionalmente se sirve pescado, principalmente brudet, bacalao en bianco o bacalao en rosso. Al mismo tiempo, las fritule siguen siendo el postre favorito de todos.

Además del hecho de que casi todas las casas en Šibenik huelen a ellas, las fritule se pueden comprar en cada esquina del mercado navideño sin plástico de Šibenik. También se debe probar su bebida caliente especial: gin caliente. Generalmente se bebe mientras se charla agradablemente con conciudadanos y queridos invitados en una de las mencionadas ubicaciones famosas de Šibenik, Poljana y Đardin, donde, según cuentan las historias, hace mucho tiempo en estas fiestas, se intercambiaban buenos deseos, junto con canciones y bocadillos.

Un almuerzo tradicional de Navidad generalmente consiste en carne, con guarniciones de papas y chucrut, por ejemplo, mientras que toda la ceremonia hedonista comienza con un vaso de aperitivo: prošek, licor de ajenjo, o lo que sea que uno disfrute. Las luganige son otra delicia que forma parte del banquete navideño y un secreto bien guardado de la zona. En pocas palabras, las luganige son salchichas hechas de una mezcla de carne de cerdo y cordero. Lo que las hace excepcionales son las especias: jugo de limón y ralladura de limón, ajo, pimienta, cilantro y canela.

Durante la temporada festiva, simplemente pasear por las calles de piedra es una experiencia mágica, debido a las miles de luces brillantes y el fuerte olor a incienso.

Como Dalmacia es famosa por sus excelentes vinos, uno debe probar simplemente Debit, un vino blanco seco ligero y fresco, Rose, un vino seco color salmón con aromas atractivos, y Babić, un vino tinto hecho de la variedad de uva local homónima.

Cualquiera que sea la costumbre que decidas probar esta Navidad, ¡te deseamos unas fiestas llenas de salud, paz y amor, y un feliz año nuevo!