Su naturaleza intacta, numerosas cascadas y lagos, y el agradable murmullo del agua, todos ellos te esperan en el parque. En tu camino hacia allí o de regreso a D-Marin Mandalina, detente en Konoba Vinko. Ubicada en el pueblo de Konjevrate, esta taberna es un punto de encuentro para todos los que van y vienen de Šibenik, ¡y lo ha sido durante más de un siglo! Es difícil decir si es por el mejor cordero que se encuentra en esta parte de Croacia, el pan casero caliente que se derrite en tu boca, su aroma que perdura en tu memoria, o quizás el ambiente acogedor. ¿Quizás el secreto reside en el prosciutto dalmatino que se derrite en tu boca? Lo mejor es que busques la respuesta tú mismo.

Baraka, Bibich, Birin, Sladić Ante, Sladić y los enólogos de Testament, así como las bodegas Duvančić, Džapo y Dalmaci de las áreas de Drniš y Knin, junto con Gracin, Prgin y Matošin de Primošten, son los grandes nombres de la escena vinícola contemporánea de Šibenik. Han vertido su amor por el vino y su oficio en etiquetas de vino que querrás llevarte a casa. Puedes disfrutar de estos durante tu estancia en la zona de Šibenik, tradicionalmente una región vinícola. Sugerimos, entre otras cosas, que tomes una copa del mejor vino de Šibenik y disfrutes de la vista de, digamos, Skradinski Buk, la cascada más larga del río Krka.

Estar cerca de Skradin y no probar el famoso risotto de Skradin sería una pena. Cada plato tradicional dálmata tiene una cosa en común: se prepara lentamente y con mucho amor. ¡Imagina cuánto amor se pone en el risotto de Skradin, cuando su preparación lleva hasta diez horas! Y si piensas que cocinarlo es complicado, espera a escuchar que los pasos de pre-preparación toman aún más tiempo. Cualquier gourmet sabe que no hay gran risotto sin un buen caldo, y el caldo para el risotto de Skradin lleva hasta 20 horas de preparación. Este risotto podría ser una de las razones por las que Bill Gates y su familia han estado visitando Skradin durante años.